Entrada 3: Rumbo al despliegue
Con el barco en condiciones, toca zarpar hacia aguas públicas. Publicar un blog no es más que lanzar una botella al mar esperando que alguien la lea.
En esta última etapa reviso cada línea como quien revisa las cuerdas antes de dejar el puerto. No hay motores, solo código estático, pero suficiente para navegar en las calmas digitales de GitHub Pages.
Bitácora cerrada… por ahora. Próxima misión: aprender a poner JavaScript sin hundir el barco.